Donde estaba el norte?

¿Cuándo fue la última vez qué fuiste feliz?. ¿Cuándo fue la última vez que reíste?. ¿Cuándo fue la vez que amaste sentir la lluvia, en tu piel, o la brisa después de ella?. ¿Cuándo fue la última vez que sentiste amor? ¿O pasión por algo?. ¿Cuándo fue la última vez que renunciaste por amor?. ¿Cuándo renunciaste al amor?.

¿Para qué servirle a un dios, que no sabe lo que quiere?.

Vos sos parte de mí, pero yo ya no soy parte de mi.

Anoche soñe, que en otra vida era un pájaro, uno muy grande. Tal vez un cóndor o un águila, la imagen no era tan clara, en mi sueño... Era libre, volaba como el viento, y hasta lo pude sentir en mi cuerpo, aunque sólo fue un sueño. Montañas, valles, playas... todo era mío... Luego alguien me encerró en una jaula, hasta volverme tan pequeño como un gorrión.  Tal vez no fue un sueño, tal vez fui yo.

La tinta no seco, cuando las palabras no alcanzan.  Del fuego, me hice carne, hasta perder la razón. Engañe a otras bocas para olvidarte. Olvidar y ser olvidado es la muerte, la muerte definitiva. Tus labios no podrán pronunciar mi nombre, luego de ver las cenizas que dejaste al irte.

Cuidar de los que te amaron, también es amar.

¿A dónde ir, cuando se cierran todas las puertas?. ¿A dónde ir, cuando el timbre no suena?. ¿A dónde ir, cuando el teléfono pasa días sin sonar?. ¿A donde ir, cuando el invierno penetre hasta los huesos y el alma?. ¿A donde ir, cuando la cabeza está por estallar?...

Yo sólo estoy tratando de volver a casa...

La rebelión de los oprimidos: De las cenizas brotará fuego. De las sombras, luz y de la muerte, vida. De mi alma, paz. Del odio, amor... El miedo, no tendrá tierra donde germinar sus semillas. La felicidad, será la esperanza, al alcance de nuestras manos.

¿Y sí dios se olvido de nosotros?. Ya no escucha las plegarias o rezos... O ¿sólo será un niño jugando con una granja de hormigas?...

Durazno en llamas... nacido del fuego, de las llamas que encienden e invaden este mundo. De las llamas que curan el pecado.  Pero no los secretos, ni rumores e historias. 

Debo sacar todo afuera, toda la furia, toda la bronca.  "Escupirles en la cara a todos los que me escupieron". Antes de que me encierren en una jaula, antes de que me encierren en mi jaula.

Seduce a todos en la noche, seduce hasta a la misma noche...

El dolor nos hace más fuerte, eso dicen. Pero cuando el camino es largo, sombrío, parece que el tiempo se realentizara o no corriese. El camino también es aprendizaje... tal vez. Hay gente que nunca aprende, tal vez sea uno el que no.

Cada cosa que poseo, me encadena. Me quema tiempo, cuidarlo, por sólo el miedo a perderlo.

Anclado en la tormenta, soy el que nadie vio. Como algo que se pierde y nadie busco, ni extrañó. Condenado al olvido, como los invisibles.

"Haría arder la ciudad con tal de ser el rey de las cenizas"

Bebiendo los últimos rayos de luz, de este pequeño y tibio sol, de los últimos días de invierno. Te pienso despacio, como se piensa lo que ya se fue. Ya es hora de un vuelo nuevo, es hora de mis sueños, y por eso me esfuerzo, porque lo añoro. Pero duele. No como antes, sino más hondo. Duele porque sigo aquí, porque sigo esperando algo que ya no existe. Y en el intento de avanzar, me arrastro con las alas rotas, sin saber si vuelo o solo caigo más lento. Mis sueños ya no brillan, son susurros lejanos de una vida que no sé si merezco. Y me esfuerzo, sí, pero no siempre por vivir… a veces solo por no morir tan pronto.

Todo esta ahí, donde busques lo que estás buscando... Sólo tienes que ser capaz de ver... Tal vez no tenga la forma o el color que creías, porque tal vez tengas que darle forma, o esperar a qué revele toda su belleza.  Mientras sigo soñando mi sueño... No hay otro lugar sin vos. Sigo soñando... De la tierra voy y a la tierra me iré.  Que nadie encienda la luz, mientras duermo. Que nadie sepa que estoy soñando. 

Mientras el bosque ardía en llamas, El mar se lleno de estrellas, que provenian del cielo, mientras navego con miedo... ¿Después de esta tormenta llegaré a puerto?. Llego la mañana, en mi cama sólo quedan cenizas...

Bebiendo de tu humor,  y los colores de su corazón,  El mar habita.

 Enfrentarse al espejo sin miedo...

Cuando el sol atraviese el vidrio de la estrella, un beso nos estará esperando. Pasada la primavera, a comienzos del verano, bajo el calor agobiante, nos estará esperando la ciudad muerta. Con sus calles vacías, la tierra seca, y el silencio. La playa estará apestada de gente, las montañas semi desiertas, como ocurre en esta época.  Cada día que pasa es uno menos, también un día menos de sombras y miedo. Y la ansiedad es como una escalera, cada día. Igual te espero.

Siempre hubo saltos en el tiempo... errores, fallas, como quieras... Lo que creían que eran dragones qué escupían fuego, y derretían ciudades, eran simples aviones. Nunca existieron dioses, magia, etc, sólo eran "trucos" para engañarnos o tecnología que volvió en el tiempo. "Trucos" para engañar, los que tienen el poder, como siempre tienen miedo a perderlo. Corrección por @eucaliptokiow Siempre hubo saltos en el tiempo, errores, fallos u otras denominaciones… Lo que creían que eran dragones que escupían centelleante fuego; derritiendo ciudades, eran meros aviones. Nunca existió la magia ni los dioses, solo trucos para engañar a la muchedumbre, por aquellos que están en la cumbre, pues temen ser como el común de los hombres.

Soy la luz que persigue las sombras...

Fue quién incendio el cielo, y se robo la luz. Dejándonos en las tinieblas, en la noche eterna.  Convirtió todo en cenizas, robándose cada color del mundo. Así también robo cada sueño de nuestras mentes, volviendonos seres más grises de lo que fuimos. Dicen que "el destino es inevitable ", no lo creo. Pero así fue. Nacido del fuego, criado entre pecados, de los peores... fue marcado por el dolor y acompañado por la soledad.  A todo eso le sumas tiempo, y se vuelve una bomba a punto de detonar en cualquier momento. Y éso sucedió... Si nadie se apiadó nunca de él, como iba a conocer la piedad, o el amor. Solo fuego...

La aurora baila en el despertar de la mañana. Juegan en mi ventana como un caleidoscopio, los haces de luz qué atraviesan mi persiana. La resaca azul, hace que siga dando vueltas en la cama. Tal vez unos amargos puedan despabilarme, pero ¡está tan linda la cama!.